martes, 4 de octubre de 2011

CAPITULO 11 (EL ALCOHOL VA DE LA MANO CON LA CALENTURA)

-buenas noches amigos! Es turno que alguien cante y que mejor que una vieja amiga-la luz señalo a una chica-denle un aplauso a CARLA MEDINA!
-para el amor de mi vida, dueño de mi corazón, tú me has hecho sentir TANTO!
Señalo a Roger, y una luz lo ubico de inmediato, un la música comenzó a sonar. Y si era una canción de Michael bublé, oh si una canción peculiar, la única que se sabía de él ¨haven´t me you yet¨ veía directamente a Roger, que mas que nervioso estaba asombrado, volteo su mirada a la mesa de Valeria y de la misma que la había mirado antes, ella lo hizo.
Había cantado como nunca en su vida, y si estaba bailando en la tarima de aquel lugar, no sabía si el sentir algo en el estomago era porque no había comido o porque literalmente le estaba diciendo a Roger ¨no te conozco pero te amo¨ y eso era lo que sentía. Pero que decía él? Que sentía él?
La canción dio fin. -Gracias, son un público maravilloso -Lanzo un beso con la mano y regreso hasta su lugar con Roger. El cual estaba todo cabizbajo.
-¿no te gusto? -dijo Carla
-Sí, solo que... esa canción me hizo recordar muchas cosas -La miro, dando luego un gran trago a la bebida que tenía en su mano. Carla se sentó y mantuvo la mirada baja, le encantó haber cantado, haberle cantado esa canción y aun sus palabras, sabe que a Roger no le gusto y se siente tonta.
Nunca va a poder remplazar a la ex.
-Carla -Roger le tomo la mano -Carla... cantas muy bonito -dijo y le dio un apretón de manos. -Mi ex también lo hace, pero a ella le falta expresar sus sentimientos en su interpretación.
-Ah -Esa fue su respuesta, junto con un dulce sonrojo.
Y aún seguía la sensación de que era una tonta, así que llamo al mesero y pidió, por qué no, una botella de tequila.
Roger sólo tenía una expresión de what the fuck? Pero no decía nada.
-Hoy vamos a festejar -Dijo Carly, sirviéndose el primer caballito y uno igual para Roger.
-Carly... -Roger iba a decir algo, pero al verla, con el rostro sonrojado, tomándose de una todo el contenido en el chupito. Se veía muy dulce y qué decir, de cómo se veían sus ojos, brillaban como nunca, así que se dejo llevar, bebiéndosele  de igual manera.
Una botella y unos cuantos limones después...
-Ro -Frente a su mesa estaba la ex novia. De la mano de su novio, sonriendo, presumiendo su sobriedad. -Ya nos vamos, solo venimos a despedirnos, espero verlos pronto -Con el veneno de una serpiente impregnado en la mirada, se despidió de Roger besándolo en la comisura de los labios. Acción que, esperaba que Carla viera, pero para su mala suerte, la pobre se levantó por más limones. -Me despides de tu novia -Dijo y por fin se fue.
Habían pasado varios minutos y su “cita” no volvía. Intentando no caerse se levantó a buscarla. En momentos como este le encantaría que el lugar fuera más pequeño, o que todos fueran vestidos de blanco menos Carla.
O ir un poco más sobrio, pero no.
No estaba. No estaba y las ganas de orinar lo estaban matando, sí a ella él no le importa, pues él ira al baño sin preocupación alguna.
Abrió la puerta y -Oh perdón – Estaba una pareja comiéndose hasta el alma por la boca. Se separaron y -¡¿QUÉ?! ¿Carla? Y yo que te estaba esperando como idiota.
Al parecer la escenita le bajo un poco la borrachera, salió a toda velocidad, maldiciendo, antes de salir del local, regresó a su mesa por la botella que aún tenía más de la mitad. En verdad no esperaba que Carla fuera así. Al menos debería tenerle un poco de respeto iba con él. PERO NO, ahí va a besarse con cualquiera.
-¡Roger espera! -Carla iba detrás de él, lo más rápido que podía. Roger se detuvo frente a su camioneta y se giró. Escuchar una explicación nunca está de más.
-¿Ahora no vas a huir? -Dijo escupiendo las palabras.
-Déjame explicarme
-¿Explicarme qué? Que como no somos nada puedes ir y besarte con quien te da la gana. Pues está bien, hazlo, pero al menos avísame para no estar esperándote como idiota.
-Yo... no... No sabía lo que hacía -Bajo la mirada. Ella sabía que beber no era lo suyo, aun así bebió como si el mundo acabara en el próximo minuto.
Y le da mucha vergüenza explicarle a Roger que, pues, que el alcohol va de la mano con la calentura y que pues, ella... El chico está lindo.
-No sabes lo que haces ¿no? -Roger la tomo por la cintura, girando luego, para azotarla, con un poco de fuerza contra el carro. Besando sus labios con fuerza y con ira. Nadie puede jugar con sus sentimientos, ni siquiera alguien tan bello. Recorría sus costados, sintiendo como se estremecía con cada roce.
Ya lo había mencionado antes, el alcohol va de la mano con la calentura. Y sí a esto le pones una pizca de coraje, quien sabe cuál sea el resultado.
Sin soltarla, abre a duras penas la puerta trasera. La empuja, y se coloca sobre ella. Volviendo a besarla, pero esta vez más lento, más dulce más suave. Y es ella quien le comienza a desnudar.
Sabe que está a punto de dar un paso importante, el que en otras relaciones, no lo daba hasta después de algunos meses. Y Roger debe ser muy especial, porque esta vez la mencionada relación, ni siquiera ha comenzado.

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